La llamada carrera del siglo presentará en la línea de salida al Keniata Wilson Kipsang, actual poseedor del récord del mundo con una estratosférica marca de 2:03:23, El Ethiope Tsegaye Kebede defensor del título, Sthephen Kipotrich, campeón mundial y medallista olímpico, Enmanuel Mutai, poseedor del récord del circuito con 2:04:40, Geofrey Mutai, ganador de los maratones de Berlin, New York y Boston con 2:03:02 y Mo Farah, ganador de la medalla de Oro en 10.000 y 5000 en la pasada edición de los Juegos Olímpicos Londres 2012. Un cartel de lujo, donde figuran otros como Tsegaye Mekonnen y Ayele Abshero que ostentan registros sorprendentes en su debut con 2:04:23 y 2:04:36 y Pedro Nimo del Oro, el llamado Albañil del Asfalto, un gallego que está decidido a enaltecer la grandeza de la lucha del ser humano por encima de los récords.
El evento tendrá matices importantes que marcaran una nueva forma de correr la distancia de Filipides. Los últimos grandes maratones han estado dominados por un grupo de africanos que mas que planificar de forma estratégica la carrera marcan ritmos muy rápidos desde los primeros kilómetros, desmembrando los grupos de cabeza a medida que avanzan. Al final ganan los más rápidos, el problema es que el grupo de los más veloces es cada vez más grande.
Esta cofradía , encabezada por Kipsang, los Mutai y Kebede cederán terreno ante los futuros protagonistas de la distancia, los Farah y Bekele. Atletas que tienen importantes registros en la pista y que pronto se traducirán en la ruta. Especialistas como Antonio Serrano ya se atreven a predecir tiempos inferiores a las 2:03:00 que serán logrados cuando el nuevo lote de cabeza asimile la presencia y ganas de la nueva generación de Maratonianos.
Estos tiempos (marcas parciales de paso) que anuncian los organizadores son los oficiales que están negociados con las
liebres que marcaran el ritmo, la proyección
de estas marcas no permiten pensar que se correrá por debajo de 2:03:00, aunque
con las credenciales de los corredores se pueden inferir que los primeros estarán
entre las 2:03:30 y 2:04:50.
Está claro
que Farah es un corredor a ser tomado en cuenta, un nuevo miembro de un selecto
club que ganará liderazgo dentro del pelotón a medida que pasen los kilómetros.
Correrá desde atrás con con Kebede, y
apostará a un final muy rápido y al desgaste del grupo de cabeza que buscará
el récord de Kipsang. Este lote estará
formado por el propio Kipsang, los Mutai y Tsegaye Mekonnen y Ayele Abshero,
no todos llegaran al kilómetro 30, donde verdaderamente comienza el maratón,
con la fuerza necesaria para mantener ritmos entre 2:45 y 2:55 por kilómetro.
Londres será
una carrera para analizar, para sacar cosas importantes, para seguir contando
gestas maratonianas que parecen imposibles, esas que crecen con corredores como
Pedro Nimo. Sus ritmos no le permitirán formar parte de los grupos de cabeza,
no pasará la media en 61:45, ni tampoco en 62:15. No pudo entrenar más de 140 kilómetros
a la semana. Su vida, no es la vida de un corredor profesional, dedicado día a
noche a entrenar y descansar, su vida está dedicada al arte de vivir, de soñar,
de inspirar. Eso ya es ganar!
Solo queda
esperar, solo nos queda vivir esta carrera desde nuestro lugar y después escribir
nuestras interpretaciones de lo que sienten estos héroes que dejaran el alma en
cada paso! El alma que se plasma en las letras de las crónicas que compartiré
con Andres Armero, Alberto Stretti, y Simon Hart,
corredores y amigos que han nutrido esta entrada del blog.
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